Acaba de empezar un nuevo minievento en el juego «Los Simpson: Springfield» (iOS/Android). Requiere actualización a través de la tienda de aplicaciones correspondiente, que retira el evento «Casa-Árbol del Terror XXXIII». En el minievento, titulado «Rompedor de átomos», a Homer le fastidia Flanders en Acción de Gracias y volvemos a encontrarnos con el jugador de fútbol americano Grayson Mathers y su prometida Kaitlyn. Sus nuevos premios y artículos en venta salen de los episodios «El Amor Es Estranguloso» (22x17) y, sobre todo, «La Marge Más Larga» (33x11).
Entre los cinco premios podremos conseguir un nuevo personaje, Kaitlyn (de «La Marge Más Larga»). Como personaje premium tenemos a Grayson Mathers (del mismo episodio), que viene con el edificio «Estadio de los Átomos de Springfield» (de «El Amor Es Estranguloso») por 150 rosquillas y que nos ayuda a conseguir los premios del minievento:
Además, con este minievento también viene el Viernes Negro de 2022, que nos trae un montón de personajes, edificios y decoraciones premium del pasado a un precio rebajado, pero, eso sí, en otro montón de cajas misteriosas temáticas. Las cajas se pueden abrir o bien con las rosquillas que tengamos, o bien con fichas de oro, que se consiguen comprando rosquillas, lo cual también nos permitirá conseguir premios extraídos de los episodios «Sin Blanca Navidad» (1x01), «Cuando Flanders Fracasó» (3x03), «Lisa, La Reina De La Belleza» (4x04) y un personaje exclusivo del juego, Mech Rosquilla, que genera rosquillas. Como siempre, todo lo que requiera dinero real no es obligatorio ni necesario para avanzar en los eventos del juego.
A continuación tenéis la imagen del minievento, que durará hasta el próximo día 30 de noviembre, y la descripción oficial de la última actualización:
Los trucos se han trucado, los tratos se han tratado, y en Springfield se ha halloweeneado otro Halloween. Llegó el momento de centrarnos en fiestas menos terroríficas y olvidarnos de estas tonterías fuera de la continuidad… excepto por los monstruos extraños que se quedarán vagando por tu ciudad para siempre. ¡Buajajajaja!
¡Al lío, springfieldianos!
