Traducimos al completo este artículo de Variety debido a su interés. Además, el showrunner, productor y guionista de Los Simpson Al Jean lo ha compartido en Twitter, lo que en principio aportaría credibilidad a lo comentado en él, aunque no ha añadido nuevas declaraciones.
Cuando Los Simpson termine su actual temporada 30 esta primavera, tendrá en su haber 663 episodios originales (y hace una temporada ya superó a «La ley del revólver» como serie guionizada en prime time más larga de la historia de la televisión). Pero con la adquisición, aún pendiente, de 21st Century Fox por parte de Walt Disney Co., una de las instituciones más inesperadas de la televisión podría resultar más valiosa a su nuevo dueño desde el retiro que como un ente en marcha.
Fuentes conocedoras de las negociaciones aseguran a Variety que Fox Broadcasting Company (FBC) y el estudio 20th Century Fox Television están cerca de firmar un acuerdo para renovar Los Simpson para sus temporadas 31 y 32. Los términos del acuerdo, entre los que se incluyen unos honorarios de licencia ligeramente más bajos respecto a los que la cadena pagó en la anterior renovación, reflejan la realidad del cambiante ecosistema económico en el que se encuentra la serie.
Representantes de Fox y Disney declinaron hacer comentarios para esta noticia.
Los Simpson ha sido tradicionalmente un artículo de reclamo para Fox Broadcasting. La cadena pierde dinero con cada episodio y los costes se han elevado con los años, pero esas pérdidas han sido más que compensadas por el dinero que la serie genera para el estudio. Cuando la empresa hermana FX Networks consiguió los derechos de reposición a través de cable y streaming en un acuerdo sellado en 2013 y valorado en 750 millones de dólares, los beneficios para 20th se incrementaron drásticamente.
Pero cuando el acuerdo con Disney se complete, FBC y 20th Century Fox ya no compartirán la misma hoja de balance. La cadena seguirá en las manos de la empequeñecida empresa de Rupert Murdoch New Fox, mientras que el estudio será parte de Disney-ABC Television Group. Fox Broadcasting, por tanto, tendrá que hacer frente por primera vez a los costes de Los Simpson al completo. Y Disney tendrá que decidir cómo encajará la serie en lo que será la cartera de contenidos más grande y valiosa de la industria del entretenimiento.
Además, en Springfield hay un pozo de dinero sin explotar que complica las cosas. Siendo tan antigua como es, Los Simpson es un vestigio de una época de la televisión que ya terminó. Cuando se firmaron los primeros contratos de reposición de la serie a principios de los 90, eran exclusivos y no concluyentes, lo que significa que duraban tanto como la serie siguiera emitiendo nuevos episodios en Fox. Esos acuerdos eran comunes en aquella época y estaban pensados para dar seguridad a los productores en un mundo en el que el cable apenas existía y quedaban décadas para el asentamiento del streaming. Pero en el caso de Los Simpson, esos acuerdos originales han evitado que el estudio de Fox fuera capaz de explotar al máximo el valor de la serie.
Cuando se firmó el acuerdo con FX, que expira en 2023, Fox tuvo que negociar con los canales que originalmente licenciaron las reposiciones de Los Simpson para que admitieran una excepción que cubriera a los canales de cable y al streaming. Sin embargo, no se pueden firmar más acuerdos de emisión hasta que la serie deje FBC. Si Los Simpson concluyera su andadura en su 32ª temporada, Disney sería libre de negociar nuevos acuerdos para televisión convencional, cable y streming que harían que los 750 millones pagados por FX parecieran una minucia.
Según el experto en medios de comunicación Brad Adgate, «Será un nuevo récord porque es una librería enorme».
Disney tiene multitud de opciones. Una fuente revela a Variety que Fox ha estado sopesando desde hace mucho tiempo dividir los episodios de la serie (que serán más de 700 al término de la temporada 32) en tres grupos que rotarían entre múltiples licenciatarios. Esta estrategia podría atraer más dinero por episodio que el que se generaría con un solo licenciatario. Otra opción para Disney sería renunciar a un acuerdo externo y, en su lugar, utilizar Los Simpson como una plataforma sobre la que edificar Disney Plus o Hulu de una manera muy parecida a como FX la usó para asentar FXX, que en aquel entonces daba sus primeros pasos.
Pero esas opciones requerirían que FBC abandonara la serie. A pesar de los costes y según personas con información privilegiada, Los Simpson es parte integral e insustituible de la identidad de la cadena. Y la nueva renovación refleja la realidad de que, tanto para Fox como para Disney, el statu quo es la mejor opción… por ahora.
«Cuando la serie termine, supongo que será porque los creadores y productores de la serie ya no querrán seguir haciéndola, no porque dos conglomerados empresariales se junten», dice Adgate. «Creo que la serie merece un final mejor».